El amor es como la luz.
La ceguera y la pobreza no son trampas, así que ¿por qué evitarlas?
En el camino de la vida, los demás caminan tambaleantes el igual que tú y yo.
Podemos obtener una sonrisa con abrazos, y podemos obtener afirmación con aprecio.Tengo un amigo que trabaja como voluntario. Es una persona muy confiable, amable y responsable.
Hubo una vez en que conversé con él y supe que estaba trabajando con niños ciegos que tenían una vida difícil, así que comencé a pensar sobre qué podía hacer por ellos. Antes de comenzar mi carrera no podía ser de mucha ayuda ya que habilidad era limitada, pero una vez que he crecido, espero poder contribuir y ayudar lo mejor posible a aquellos que lo necesitan.
Más tarde, lancé el “Fondo de Bienestar Público para Ciegos”, esperando transmitir mi propia fuerza a los grupos más vulnerables, así más personas podrán sentir el valor de la vida, incluso si solo es un poco más que antes. Creo que definitivamente serán vistos por más personas en tanto seamos lo suficientemente comprometidos. Invitamos a mi concierto en Shenzhen a algunos niños ciegos y presentamos su situación en el evento. Aunque mi fuerza personal puede no ser mucha, espero que más personas sepan de aquellos grupos y se unan en actividades de caridad, con lo que la combinación de nuestro poder será mayor.
Entre las actividades de caridad que he hecho, la que más me conmovió fue mi experiencia como maestro en las montañas de Yunnan en mi cumpleaños 22 [20 de Octubre, 2016]. Al principio, con gran expectativa y una inexplicable emoción, sentí que sería un día especial.
Era un buen día con el cielo azul y enormes nubes blancas; un día perfecto para viajar. Partimos desde el centro de Kunming y viajamos a lo largo de la montaña por más de dos horas. Durante el viaje, me preocupé sobre si los niños podrían entender el contenido de lo que enseñaría, y entonces me quedé dormido.
Al llegar a la escuela, me soprendieron los edificios de la escuela primaria, los cuales había imaginado que serían un poco rudimentarios pero en realidad se veían un tanto renovados. Había un edificio para enseñanza, un patio y una pequeña plataforma para elevar la bandera nacional, lo que en conjunto es como dice el dicho: “El gorrión es pequeño pero tiene todo lo necesario”. Sin embargo, no habían muchos estudiantes en la escuela. Tenían un grupo por grado. Muchos niños 'dejados atrás' estaban en la escuela con sus hermanos pues sus familias trabajaban en las afueras, en otras ciudades.
Parado a un lado del patio y viendo a los niños de distintas edades, los cuales mostraban curiosidad y precaución escondida en sus ojos, no pude evitar maravillarme del hecho de que sus ojos eran tan puros y brillantes, a pesar incluso de que no llevaban ropa extravagante y sus únicos accesorios eran sus simples pañuelos rojos de 'Pioneros de la juventud'.
Obviamente, los niños estaban un poco intranquilos cuando vieron a tantos extraños a la vez. Con el fin de hacer que se relajaran, encontré una oportunidad de unirme a ellos al jugando juntos. Comenzando con el juego de “El águila atrapa los pollitos”, lentamente fueron familiarizándose con nosotros y pronto se relajaron por completo. Creo que, desde sus perspectiva, los amigos son personas con las que puedes jugar.
Me comuniqué con los voluntarios en la escuela y me supe que habían muy pocos cursos que podría enseñar, así que al final elegí el tema de música, pues es en lo que soy bueno. Tenían dos clases en quinto grado, así que di clases en uno de ellos.
Al recordar, creo que fue algo muy especial el enseñar a los estudiantes desde el podio, sus ojos eran tan puros que no quería decepcionarles.
Escribí en el pizarrón la lírica de “Luz de luna” y les enseñé frase por frase.
“Caminando solo en las calles
Veo la luz de luna en el cielo
Me recuerda aquella noche que estuvimos juntos
Eres como la luna
Y yo soy el sol
En silencio detrás de ti,
Brindándote calor con mi luz.”
Los bocadillos y los pequeños regalos que preparamos antes de llegar, fueron usados bien durante la clase. Los estudiantes fueron recompensados con bocadillos tras memorizar una oración y con el tiempo, básicamente al terminar la clase, ya podían cantar toda la letra de “Luz de luna”. El tiempo de concentración de un niño es limitado, por ello algunos perdieron ligeramente la paciencia hacia el final de la clase, pero aún así intentaron comportarse, lo cual era bastante lindo.
Durante el descanso, corrieron para jugar alrededor de una simple mesa de ping pong, cuyos pilares estaban hecho de trozos de tabiques, pero aún así parecieron divertirse bastante. En comparación con los niños de la ciudad, ellos aprenden y viven en un entorno que quizás no puede ser el más cómodo, pero la alegría pura de sus corazones puede transmitir todo tipo de energía almas de buen corazón.
Les observé por un tiempo y me di cuenta de que jugaban bastante bien, así que no pude evitar acercarme y preguntar, “¿Una partida?”. Pero pronto me encontré perdiendo el juego; ciertamente, las capacidades de los niños nunca deben subestimarse.
Para la hora del almuerzo, todos se fueron hacia la cafetería de la escuela. Independientemente de sus clases, los niños se formaron en orden, sosteniendo un impecable tazón de acero que parecía una taza, y esperaron a que los maestros sirvieran la comida. Entonces, en grupos de tres o cuatro, salieron de la cafetería para ir al patio y alrededor de la canasta de baloncesto para comer lentamente. Rápidamente me acerqué y me senté con ellos, tomando el sol.
Mientras comían, algunos niños mayores cuidaban de sus hermanos pequeños, como si fueran pequeños adultos. Cuando otros amigos terminaban de comer, iban juntos a lavar los cubiertos. Sin importar lo jóvenes que eran, lavaban los platos de forma independiente y responsable, sin molestar a los demás.
Bajo el mismo cielo azul, me conmovió profundamente su felicidad. ¡Era un grupo de niños con amor, que también merecían el mejor amor!
Esta experiencia de docencia era totalmente distinta a mi trabajo común, y se sentía más como enseñar y recibir enseñanzas al mismo tiempo. Por una parte, les enseñé a los niños a cantar y a dibujar, y por otro lado, ellos me enseñaron a sentir la sutil belleza de la vida. Estoy muy feliz de haber tenido la oportunidad y habilidad de poder hacer esto por ellos, y ser más firme en mis elecciones de filantropía.
Las personas que se dedican al bienestar social comparten amor y bondad. Haré lo que sea necesario para acumular y entregar estos valiosos regalo a las personas necesitadas.
*
Traducción al español: Siboney69
Traducción al inglés: YuZhou YZ.
Nota personal: Hay programa chino llamado “Go Fighting!” que es bastante popular y lleva varias temporadas al aire. En uno de sus episodios se llevó al elenco a las montañas (a uno de esos pueblos lejanos) y se les indicó que hicieran algo como lo que narra Timmy... Pasaron tiempo con los niños en la escuela, además de que se mostró un poco de la vida de los pequeños. Les dejo el link por si les interesa verlo...
T4 - Ep.6
T4 - Ep.7
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